miércoles, 7 de abril de 2010

Mercurio, Venus y la Tierra

Mercurio

Es el planeta más cercano al Sol y el segundo más pequeño del Sistema Solar. Mercurio es menor que la Tierra, pero más grande que la Luna.

Si nos situásemos sobre Mercurio, el Sol nos parecería dos veces y media más grande. El cielo, sin embargo, lo veríamos siempre negro, porque no tiene atmósfera que pueda dispersar la luz.




Los romanos le pusieron el nombre del mensajero de los dioses porque se movía más rápido que los demás planetas. Da la vuelta al Sol en menos de tres meses.

En cambio, Mercurio gira lentamente sobre su eje, una vez cada 58 días y medio. Antes lo hacía más rápido, pero la influencia del Sol le ha ido frenando.

Cuando un lado de Mercurio está de cara al Sol, llega a temperaturas superiores a los 425 ºC. Las zonas en sombra bajan hasta los 170 bajo cero. Los polos se mantienen siempre muy fríos. Esto lleva a pensar que puede haber agua (congelada, claro).

La superficie de Mercurio es semejante a la de la Luna. El paisaje está lleno de cráteres y grietas, en medio de marcas ocasionadas por los impactos de los meteoritos.

La presencia de campo magnético indica que Mercurio tiene un núcleo metálico, parcialmente líquido. Su alta densidad, la misma que la de la Tierra, indica que este núcleo ocupa casi la mitad del volumen del planeta.







Venus


Aunque se creía parecido a la Tierra, lo cierto es que es completamente diferente. Venus es el segundo planeta del Sistema Solar en orden de distancia desde el Sol, y el cuarto en cuanto a tamaño (de menor a mayor).


Recibe su nombre en honor a Venus, la diosa romana del amor. Se trata de un planeta de tipo terrestre o telúrico, llamado con frecuencia el planeta hermano de la Tierra, ya que ambos son similares en cuanto a tamaño, masa y composición.

La órbita de Venus es una elipse con una excentricidad de menos del 1%, prácticamente una circunferencia. Al encontrarse Venus más cercano al Sol que la Tierra, siempre se puede encontrar, aproximadamente, en la misma dirección del Sol (su mayor elongación es de 47,8º), por lo que desde la T
ierrala Luna y el Sol).


Venus es normalmente conocido como la estrella de la mañana (Lucero del Alba) o la estrella de la tarde (Lucero Vespertino) y, cuando es visible en el cielo nocturno, es el objeto más brillante del firmamento, aparte de la Luna. Por este motivo, Venus debió ser ya conocido desde los tiempos prehistóricos. Sus movimientos en el cielo eran conocidos por la mayoría de las antiguas civilizaciones, adquiriendo importancia en casi todas las interpretaciones astrológicas del movimiento planetario. En particular, la civilización maya elaboró un calendario religioso basado en los ciclos de Venus. El símbolo del planeta Venus es una representación estilizada del espejo de la diosa Venus: un círculo con una pequeña cruz debajo, utilizado también para denotar el sexo femenino.



Posee una atmósfera muy densa, que envuelve al planeta completamente. La presión en la superficie es equivalente a estar a 1 Km bajo el agua. La temperatura es elevadísima, llegando hasta los 450 ºC. Es aún más caliente que Mercurio, y a diferencia de éste, donde los polos son fríos, la temperatura es prácticamente uniforme en todo el planeta. Venus tampoco tiene satélites


La Tierra


La Tierra es el tercer planeta del Sistema Solar, considerando su distancia al Sol, y el quinto de ellos según su tamaño. Está situada aproximadamente a unos 150 millones de kilómetros del Sol. Es el único planeta del universo que se conoce en el que exista y se origine la vida.


La Tierra se formó al mismo tiempo que el Sol y el resto del Sistema Solar, hace 4570 millones de años. El volumen de la Tierra es más de un millón de veces menor que el Sol y la masa de la Tierra es nueve veces mayor que la de su satélite, la Luna. La temperatura media de la superficie terrestre es de unos 15 ºC.


En su origen, la Tierra pudo haber sido sólo un agregado de rocas incandescentes y gases. A la forma de la Tierra (entendida como la altura media del mar o que adoptaría el mar en los continentes) se le denomina geoide. El geoide es una superficie similar a una esfera achatada por lo polos (elipsoide). Su diámetro es de unos 12 700 km, más de diez veces la longitud de la península Ibérica. Las primeras culturas creían que la Tierra era plana.


Algunos astrónomos eminentes de la Antigüedad plantearon la posibilidad de que la Tierra no fuese plana sino esférica, ya que de esa manera muchos fenómenos naturales tendrían una explicación lógica. Sin embargo, hasta el siglo XVI no se pudo demostrar que era esférica, cuando Juan Sebastián Elcano completó la primera vuelta al mundo a bordo de un barco.


La Tierra es un planeta cuya superficie está cubierta en un 70% de agua líquida. Permanece envuelto en la atmósfera, compuesta fundamentalmente de Nitrógeno (75%) y Oxígeno (23%). Presenta un fuerte campo magnético debido a la capa de hierro líquido que envuelve el núcleo. La Tierra disfruta de un satélite enorme y cercano, la Luna, 1/4 del diámetro terrestre. Hasta el momento es el único planeta en el que se conoce la presencia de vida.

















http://www.ite.educacion.es/w3/eos/MaterialesEducativos/mem2000/astronomia/chicos/sistema_solar/index.html



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